El número 33
Después de eones de no escribir nada (ya lo sabeís: Mis entradas son proporcionales a mis ganas de que la gente se entere de lo que hay en mi chaveta) decidí hacer una entrada sobre las "coincidencias"
Ésas malditas casualidades que parecen colarse en tu vida, para darle algo más de color, sentido o yo que sé.
Es ese extraño gusto que tiene el ser humano por relacionar todo con cosas ya conocidas y que no se siente feliz si no le pone etiquetas a las cosas.
Ésas malditas casualidades que parecen colarse en tu vida, para darle algo más de color, sentido o yo que sé.
Es ese extraño gusto que tiene el ser humano por relacionar todo con cosas ya conocidas y que no se siente feliz si no le pone etiquetas a las cosas.
¿Por qué el humo que salía de las torres gemelas tenía forma de demonios? ¿Porqué no puedes imaginar la nada? Simple, porque no podemos vivir con la incertidumbre de no tener referencias para algo.
¿Por qué cuestionarme todo ello? Buenpo, alguien me recomendó la película "El número 23" protagonizada por Jim Carrey. Y sí, la consideré rebuscada al extremo.
¿Por qué cuestionarme todo ello? Buenpo, alguien me recomendó la película "El número 23" protagonizada por Jim Carrey. Y sí, la consideré rebuscada al extremo.
Pero, jugando un poco con ese sentimiento de creer que tu vida sigue una espiral cósmica tendenciosa, diré que en mis años mozos me pasaba algo similar, mi número en este caso era el 33. Alguien, no recuerdo bien quién, me dijo que ese número me traería suerte. No sé de qué tipo, pero curiosamente me pasaban cosas como ver el reloj a las 3:33, y ese ocio por encontrar datillos, tipo Mr. Sparrow de la peli.
Mi padre tenía 33 años cuando yo nací.
Jebús se bautizó a los 33
Mi padre tenía 33 años cuando yo nací.
Jebús se bautizó a los 33
Y el gracioso colmo es cómo en una rifa de la vieja escuela -rifa de un pobre colega que estaba juntando dinero para pagar sus exámenes extraordinarios-, compré el #33 para demostrar "que ese número no era nada" y cuál es la jodida sospresa. La bofetada de don Karma y una delicia para las Leyes de Murphy que gané... el segundo lugar.
Y buéh, cuando el primer lugar gana porque compró la mitad del boletaje, sabes que lo tuyo fue pura suerte atribuída a un número mágico.
Y buéh, cuando el primer lugar gana porque compró la mitad del boletaje, sabes que lo tuyo fue pura suerte atribuída a un número mágico.
Aunque ciertamente lo mío no desencadenó en una paranoia, pero si es un anecdotario jocoso.
Recuerden sumar las fechas con las letras, los colores y etcéteras para formar su paranoia~
Recuerden sumar las fechas con las letras, los colores y etcéteras para formar su paranoia~